Infantil Masculino: Miguel Servet 42 - C.D Careba 17

No podemos renunciar a nuestras señas de identidad, y lo sabemos. Sabíamos que teníamos que hacer para realizar un buen partido pero todo se volvió a nuestra contra.

El partido se planteó, como siempre, en función de los jugadores disponibles, y a partir de ahí se disputó el partido. Nada salió, ni el planteamiento ni el desarrollo, ni la teoría ni la práctica, ni la presión ni la salida de presión, ni la ayuda ni la línea, ni el contraataque ni el balance defensivo, ni el ataque ni la defensa. Fue, evidentemente, un mal partido... pero no hay que dramatizar.
La diferencia de edad fue la que puso la guinda a nuestros propios fallos, pero tampoco hay que buscar excusas.

Desde el inicio las transiciones fueron malas, y el equipo parecía siempre llegar un poco más tare... ¿fruto de sólo entrenar el lunes? Quizás ese fue el aspecto más importante.
El 16 - 0 del rival fue compensado por un 0 - 9 en el segundo cuarto, más por mérito nuestro por desmérito del contrario, como se demostró en el tercer cuarto.

Esta liga no es nuestra lucha, nuestra lucha es MEJORAR de cada al año que viene, y eso significa no poder permitirnos dar pasos atrás. Conceptos que creíamos plenamente aprendidos se demostró que no es así. Más debemos transformar esta derrota a una derrota útil, ya que del error es como mejor se aprende. Quizás, la próxima vez cuando se pregunte si algo se ha comprendido nos pensemos dos veces el asentir con la cabeza. Quizás, algunos dejemos de preocuparnos por el aspecto personal, por nosotros mismos, y pensemos en el equipo, como equipo.

El partido nos hizo daño, mucho daño... pero si algo hace este equipo es no rendirse nunca, hasta el último momento o hasta que las fuerzas nos fallen; nadie puede ponerlo en duda.

Sólo queda volver a levantarnos y continuar el viaje, cuyo próxima parada la encontramos este lunes, a las 18:00.

Descansad, disfrutad del domingo, y hasta mañana por la tarde